Novedades legislativas y técnicas que han cambiado digital y tecnológicamente a la ITV

Novedades legislativas y técnicas que han cambiado digital y tecnológicamente a la ITV

Según TÜV SÜD, han evolucionado obligadas por la llegada de híbridos y eléctricos o por la incorporación de sistemas de diagnóstico de a bordo, que permiten detectar defectos que antes no podían ser evaluados

TÜV SÜD ha analizado la transformación digital y tecnológica que ha experimentado el sector de las ITV en los últimos años. La incorporación de nuevas e innovadoras tecnologías, unida a la rápida adaptación de los profesionales al nuevo manual de inspección y a la obligatoriedad de los fabricantes de proporcionar más información sobre el correcto funcionamiento de sus sistemas, ha supuesto un valor añadido para garantizar la seguridad y calidad de los procesos.

Juan Portillo, director técnico de la división ITV de TÜV SÜD España, explica algunos hitos que han marcado la evolución del sector, como “el comienzo de la inspección técnica de ciclomotores en 2007, que incluyó la prueba de velocidad máxima y redujo hasta el 50% las víctimas mortales y heridos. Otro ejemplo, ha sido el tratamiento de los valores de inspección a través de un software de gestión, que evita errores o manipulaciones en el almacenamiento de los datos, o la lectura electrónica del tratamiento de los gases contaminantes de las centralitas a través de dispositivos OBD, que detecta defectos del vehículo que antes no podían ser evaluados”.

Con la incorporación de nuevos tipos de motores, como los híbridos y eléctricos, los profesionales de las inspecciones y las estaciones han tenido que reciclarse para actualizar sus conocimientos y poder inspeccionar esta diversidad de vehículos. “Como regla general, señala Portillo, los inspectores deben contar con una formación profesional mínima de grado superior en automoción o grado medio con experiencia de tres años en el sector, aunque deben completar su cualificación superando un proceso de formación de, al menos, 120 horas sobre la actividad de la ITV”. Aun así, el directivo de TÜV SÜD prevé que la digitalización de los procesos siempre requerirá de una tercera parte formada con criterio técnico para emitir el dictamen final.

Nuevos métodos para realizar la prueba de emisiones contaminantes han surgido con la llegada de los híbridos y eléctricos.  Así, advierte Portillo, “de cara al futuro se establecerán puntos de inspección específicos para evaluar los sistemas de los vehículos electrificados. Desde su homologación, baterías, motores y otros componentes deben cumplir ciertos requisitos para asegurar su seguridad frente al riesgo eléctrico y, precisamente, comprobar que siguen siendo efectivos a lo largo de la vida útil del vehículo será misión de la ITV”.

Por otro lado, el nuevo Real Decreto sobre ITV trae importantes novedades en herramientas de diagnóstico electrónico como OBD, lo que supone una optimización en el análisis técnico. “A través de una conexión estándar, las centralitas se conectan a un lector encargado de gestionar el motor y, en caso de producirse algún defecto en el funcionamiento, registra el fallo. Casi el 10% de los vehículos inspeccionados con este sistema han presentado algún defecto que antes no éramos capaces de detectar”, finaliza Portillo.

información publicada por : infotaller.tv

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